Debido a que la vida está llena de incertidumbre, nuestras necesidades de espacio vital cambian constantemente. La única constante es el cambio mismo.
La filosofía de diseño de este destacado proyecto está profundamente inspirada en las ideas eternas de la filosofía y el pensamiento científico. Se esfuerza por responder a través de la arquitectura a una de las mayores verdades de la vida:
La vida humana está en continuo movimiento, y los espacios en los que vivimos deben adaptarse a este movimiento.
El proyecto no es un producto arquitectónico estático.
Es un sistema espacial vivo diseñado para crecer en cada etapa de la vida y evolucionar con el tiempo. Cada estructura, cada configuración dentro de un proyecto es un equilibrio preciso entre adaptabilidad e individualidad.
El proyecto ofrece a sus residentes más que solo un lugar para vivir.
Te da una sensación de control: un espacio que te permite moverte con seguridad y claridad por la vida.
La entrega es en agosto de 2028.