La villa, que data del siglo XVIII, está situada en una zona estratégica a las puertas de Padua, a solo diez minutos del centro histórico y a 2,7 km de la salida de la autopista Padua ZI. Se extiende sobre una parcela de unos 10.000 metros cuadrados, caracterizada por un romántico jardín de estilo escuela japonesa. La propiedad incluye cuatro edificios dispuestos en forma de herradura, con una superficie total cubierta de unos 1.200 metros cuadrados.
Aunque está inscrita en el registro del Instituto Regional de Villas Vénetas, la villa no está vinculada a la Superintendencia. En 2005, se sometió a una importante intervención de recuperación arquitectónica y consolidación estructural. Actualmente, el interior se encuentra en un estado rudimentario, dejando a los futuros compradores la oportunidad de completar la renovación según sus propias necesidades.
El avance de la obra está al 65%, y el destino urbano actual es residencial/oficina, con posibilidad de uso comercial en la planta baja. Una propiedad ideal para diversos fines, gracias a su versatilidad y ubicación privilegiada.