Esta hermosa villa es una antigua casa señorial, construida en piedra local, de tres plantas y que presenta una arquitectura típica de la Toscana del siglo XVII.
Su ubicación, a los pies de Cortona, y su proximidad a las principales ciudades de arte de la Toscana y la vecina Umbría la convierten en la propiedad ideal para explorar la belleza artística de la zona.
Los muebles son funcionales y cómodos, pero destacan por la delicadeza y el refinamiento de los accesorios y la calidez que brindan los muebles antiguos.
Como es típico de cualquier casa señorial, la planta baja es un espacio abierto donde, delimitado por arcos, hay un comedor, una sala de estar y una gran chimenea típica de la Toscana con bancos internos.
También desde esta cálida y luminosa habitación, se ingresa a la gran cocina, equipada con todos los accesorios.
Desde todas las habitaciones de la planta baja se accede al jardín a través de ventanas francesas.
En esta planta hay un baño de invitados.
El primer piso, al que se puede acceder por la amplia y cómoda escalera interna de piedra con divisiones panorámicas, está dividido en dos alas. La primera alberga un precioso salón con televisión, a continuación una sala de lectura con sofás y una habitación doble con baño en suite. También en esta parte de la casa se encuentra el cuarto de lavado y plancha.
En la otra ala se encuentran dos habitaciones dobles con dos baños privados muy amplios.
En la planta superior se encuentra la zona de noche con una habitación de matrimonio con baño en suite, una habitación doble con baño en suite, otras tres habitaciones dobles y una habitación con tres camas servida por dos amplios baños.
Todas las estancias son muy amplias y luminosas.
La casa está completamente vallada y rodeada de un parque de 2500 m2 delimitado por setos que garantizan la privacidad. Tiene dos entradas con puertas de hierro forjado que dan acceso al jardín y al aparcamiento.
La piscina mide 5x10 metros con una profundidad máxima de 1,8 metros.
Rodeada de un cuidado jardín, la piscina está equipada con cómodas tumbonas y sombrillas, creando el entorno perfecto para tomar el sol o simplemente relajarse con un buen libro. Una ducha al aire libre hace que el acceso a la piscina sea aún más cómodo, mientras que los cenadores con mesas al aire libre brindan un espacio ideal para cenar al aire libre o disfrutar de una bebida refrescante.
El ambiente tranquilo y la vista del paisaje circundante hacen de la piscina un lugar encantador para socializar con amigos y familiares, o para disfrutar de momentos de tranquilidad en total privacidad. Es el lugar ideal para recargar las pilas y experimentar plenamente la belleza de la Toscana.