Inmersa en la tranquilidad y la belleza del corazón de la Toscana, esta propiedad ofrece un oasis de paz ideal para estancias relajantes en cualquier época del año. Ubicada a poca distancia de Siena, disfruta de una posición privilegiada con impresionantes vistas a las antiguas torres de San Gimignano y a la verde campiña toscana.
En el exterior, la propiedad se extiende sobre un parque de unos 6.500 metros cuadrados, organizado en varios niveles y caracterizado por amplias zonas de césped. La verdadera joya es la piscina, perfectamente expuesta al sol, que ofrece total privacidad y una espectacular vista panorámica.
En el interior, la propiedad cubre una superficie de aproximadamente 860 metros cuadrados, divididos en siete apartamentos de estilo rústico típico de la Toscana. Los detalles incluyen acabados de piedra, arcos de ladrillo y techos con bóvedas y vigas de madera a la vista. Las habitaciones, amplias y luminosas, tienen vistas encantadoras al paisaje circundante.
La propiedad tiene una historia fascinante: una vez parte de un antiguo monasterio medieval, fue cuidadosamente restaurada a fines de la década de 1990, respetando la arquitectura original e integrando comodidades modernas.