Situada en una posición privilegiada, esta villa de finales del siglo XIX combina la elegancia histórica con las comodidades de la modernidad. Una restauración meticulosa ha realzado su carácter auténtico, enriqueciéndola con detalles contemporáneos. La entrada a la propiedad está marcada por una encantadora avenida bordeada de cipreses.
La villa, actualmente dividida en dos secciones, ofrece espacios amplios y luminosos. La residencia principal da la bienvenida con una sala de estar adornada con una chimenea, un estudio y un comedor conectado al jardín.
La cocina, moderna y práctica, se integra perfectamente en el conjunto. En el piso superior, el suelo de parquet y un sistema de calefacción por suelo radiante geotérmico garantizan el confort, mientras que numerosas ventanas inundan las habitaciones de luz natural. El dormitorio principal, con acceso directo a una logia privada, es un remanso de elegancia: incluye un baño exclusivo con bañera y ducha y un amplio vestidor. En la misma planta hay cuatro dormitorios más, uno actualmente utilizado como gimnasio y dos baños.
La segunda unidad, que se puede integrar fácilmente con la principal, cuenta con cocina y sala de estar en la planta baja, mientras que el nivel superior alberga dos acogedores dormitorios y un baño. También hay un anexo de 84 metros cuadrados en el cuidado jardín de estilo típico italiano, además de la impresionante vista panorámica, cuenta con un pequeño huerto, majestuosos robles, unos 50 olivos y una piscina climatizada y purificada con sal que completan este rincón relajante.
La villa está ubicada en una posición estratégica, lo que permite disfrutar de la tranquilidad de la campiña toscana sin renunciar a la comodidad de los servicios: el famoso campo de golf Castiglion del Bosco está a solo 14 km, los principales servicios están a solo 3 km y Siena está a solo 25 minutos.